Las hamburguesas con base vegetal fueron uno de los productos más hot de 2018 gracias a la batalla entre dos de las compañías más ocupadas de la industria: Impossible Foods y Beyond Meat. Y a juzgar simplemente por el número de cadenas que han añadido alternativas de “carne” basada en plantas a sus menús, estas opciones vegetarianas fueron una tendencia que hay que tener en cuenta.

Pero aunque asumimos que cadenas como White Castle y Carl’s Jr. están agregando hamburguesas a base de plantas porque la gente las quiere y no solo porque está de moda, ¿realmente existe la demanda? Una nueva encuesta sugiere que, sí, hay más personas interesadas en los alimentos de origen vegetal que antes.

El sitio de encuestas, YouGov de la marca de alimentos sin lácteos Kite Hill, consultó a más de 1,200 adultos estadounidenses en línea el noviembre pasado, para conocer su opinión sobre el auge de los alimentos basados en plantas. De hecho, el 34% de los encuestados dijo que consideraría comer alimentos de origen vegetal como una forma de lograr sus objetivos de salud para 2019.

“Este fue un cambio emocionante en la percepción con respecto a los productos de origen vegetal, que solía considerarse una dieta muy específica,” declaró el comunicado.

Dicho esto, la encuesta también encontró que las personas no van a cambiar a alimentos basados en plantas si saben mal.

El 80% de los encuestados dijo que el sabor es un factor importante cuando se trata de probar un alimento a base de plantas o no. En teoría, ahí es donde los productos como Impossible Burger y Beyond Burger intentan hacer sus avances: ambas marcas dicen que sus productos se parecen más a la carne real que a cualquier otra hamburguesa vegetariana anterior.

Por supuesto, Kite Hill fue la marca que invirtió el dinero para la encuesta, por lo que también querían saber cómo se sentía la gente con respecto a su ángulo particular. Específicamente, los resultados muestran que más del 44% de los estadounidenses consideran atractiva la idea de yogurt o queso crema hecho con leche de almendras.

Ese número parece bastante prometedor … hasta que te das cuenta de que, más o menos, la mitad de las personas encuestadas parecen odiar la leche de almendras en serio, lo que demuestra que cuando se trata de alimentos de origen vegetal, todavía es una batalla cuesta arriba.