Los niños suelen tener inesperadas ocurrencias y dicen lo primero que se les pasa por la cabeza. En este caso, los pequeños sacan sus dotes de críticos musicales y no dejan 'títere con cabeza': las letras, los ritmos de las canciones e incluso el propio nombre de la icónica banda de rock, nada escapa a los afilados comentarios de los niños.